Las obras de cimentación que se han considerado en esta parte de la Guía se han agrupado en diferentes tipos. Para cada uno de ellos se indica, a continuación, qué aspectos conviene controlar, en general, con mayor intensidad. Esa conveniencia viene dictada no sólo por el interés particular del aspecto concreto que se ausculta, sino también por la viabilidad técnica y la factibilidad (económica) de cada tipo de control.
La necesidad en su caso de instalación de equipos de auscultación deberá determinarse bien en el Proyecto, durante la construcción, o bien derivarse de las inspecciones del Sistema de Gestión de Puentes o programa que lo sustituya, cuando ello proceda, o de las encuadradas en las ope- raciones de conservación de la carretera.
En general bastará con auscultar ciertos aspectos, que serán aquellos que, simultáneamente, sean más interesantes y fáciles de controlar. Estos aspectos son los que aquí se indican como «normales».
Cuando la singularidad del caso lo requiera, serán recomendables equipos de control más complicados o una auscultación más intensa. Estos casos son indicados en este apartado como «especiales».
1. Pilas de puente
Cuando, según los criterios especificados, se considere necesario proceder a la auscultación de las cimentaciones de las pilas de los puentes, conviene auscultar los asientos. Cuando se tema o se produzca alguna patología, conviene auscultar también los movimientos horizontales.
Aunque el control de asientos puede permitir el conocimiento de los posibles giros, en ocasiones, particularmente si se trata de la observación de una patología, también conviene medir directamente los posibles giros de la cimentación. Sólo en algunos casos muy especiales puede resultar interesante auscultar el estado de presiones intersticiales bajo el apoyo de una pila de puente. En la figura 8.1 puede apreciarse un esquema de la disposición de la auscultación recomendada.
FIGURA 8.1. ESQUEMA DE POSIBLE AUSCULTACIÓN DE UNA CIMENTACIÓN DE PILA
DE PUENTE SOBRE ZAPATA
NOTA: Cuando interese un control detallado y preciso de los asientos, deben disponerse extensómetros de varilla.
2. Estribos de puente
Cuando, según los criterios especificados, se considere necesario proceder a la auscultación de los estribos de puentes, la situación general será muy similar a la de las pilas, a excepción de en dos aspectos: puede ser interesante el control de las presiones intersticiales (posibles empujes de agua), y resulta de interés colocar medidores sencillos de aper- tura de juntas en la unión estructura-estribo, si es que tales juntas existen. Véase figura 8.2.
FIGURA 8.2. ESQUEMA DE POSIBLE AUSCULTACIÓN DE UN ESTRIBO DE PUENTE
NOTA: En algunas circunstancias (estabilidad global precaria) puede ser interesante instalar inclinómetros.
3. Muros de fábrica
Cuando, según los criterios especificados, se considere necesario proceder a la auscultación de los muros de fábrica, los aspectos a controlar serán sensiblemente los mismos que en los muros-estribo. El control de juntas en este caso se referirá a las que existan para per- mitir la dilatación de los diferentes tramos. Los principales elementos de auscultación que pueden utilizarse en los muros de contención rígidos se indican en la figura 8.3.
FIGURA 8.3. ESQUEMA DE POSIBLE AUSCULTACIÓN DE UN MURO DE CONTENCIÓN
NOTA: Cuando la estabilidad global pueda ser dudosa deben instalarse inclinómetros (7).
4. Muros flexibles
Cuando, según los criterios especificados, se considere precisa la auscultación de los muros flexibles, interesará, en general, el control de los movimientos externos de asiento y desplazamiento horizontal.
Los giros, al no ser el muro rígido, no tendrán tanto interés como en el caso precedente; en cambio, puede ser muy interesante el control de las «extensiones» internas en los muros de suelo reforzado (flejes o geocompuestos). Un esquema recomendable para disponer la auscultación se indica en la figura 8.4.
FIGURA 8.4. ESQUEMA DE POSIBLE AUSCULTACIÓN DE UN MURO FLEXIBLE
NOTA: En algunas circunstancias (estabilidad global precaria) puede ser interesante instalar inclinómetros.
5. Pasos inferiores
En los casos en que, según se especifica, sea precisa la auscultación de pasos inferiores, en general resulta de interés controlar los asientos de su solera (y/o hastiales) y los movimientos de sus juntas. En muy contadas ocasiones, puede ser conveniente medir deformaciones unitarias en el hormigón (véase figura 8.5). Cuando los pasos inferiores son de pequeño tamaño (caños, tajeas y otros conductos transversales) el interés de la auscultación puede ser menor, aunque cualitativamente similar al de los pasos inferiores de mayor tamaño.
FIGURA 8.5. ESQUEMA DE POSIBLE AUSCULTACIÓN DE UN PASO INFERIOR
NOTA: En algunas circunstancias (estabilidad global precaria) puede ser interesante instalar inclinómetros.
6. Cimientos de terraplenes
No es necesario disponer de auscultación en los cimientos de terraplenes de forma rutinaria y con carácter general, no obstante puede ser conveniente en ciertos casos especiales, o cuando se trate de suelos blandos, controlar los asientos y las presiones intersticiales (véase figura 8.6).
FIGURA 8.6. ESQUEMA DE POSIBLE AUSCULTACIÓN DEL CIMIENTO DE UN TERRAPLÉN
SOBRE SUELOS BLANDOS
7. Micropilotes y anclajes
En el caso de micropilotes y anclajes, usados como elementos auxiliares de cimentación (si- tuación frecuente únicamente en la solución de ciertos casos patológicos) puede ser de interés controlar los movimientos de sus cabezas y, en ocasiones, su tensión de trabajo (células de carga, de- formaciones unitarias medidas con galgas extensiométricas, etc.).
Los aspectos anteriores, que se resumen en la tabla adjunta, no deben considerarse una relación cerrada, sino al contrario, una enumeración muy general de algunos de los de más frecuente auscultación, siempre que se determine su necesidad. El proyecto de auscultación particular de cada obra concreta en su caso, o el estudio de cada patología deberá decidir, de manera justificada, la auscultación más conveniente.